1. Concéntrate en tu respiración
Cuando te sientas estresado en tu vida diaria, céntrate en inspirar profundamente y exhalar lentamente. Es importante que dejes que tu abdomen se eleve al inhalar y descienda al exhalar. Repite este proceso durante unos minutos y notarás cómo tu cuerpo y tu mente se relajan.
2. Concéntrate en tus sensaciones corporales
Tomar un poco de tiempo cada día para centrarte en las sensaciones de tu cuerpo también puede ayudarte a reducir el estrés. Experimenta conscientemente la sensación del agua contra tu piel cuando te das un baño, o la sensación de espuma del jabón cuando te lavas las manos. Centrarte en las sensaciones de tu cuerpo te ayudará a permanecer en el momento presente, y tu mente se sentirá en paz.
La atención en las sensaciones de tu cuerpo te ayudará a mantenerte en el momento presente, y tu mente se sentirá en paz.
3. Escucha los sonidos de la naturaleza
Los sonidos de la naturaleza son muy eficaces para aliviar el estrés. Escuchar los sonidos de la naturaleza, como el bosque, el océano o el canto de los pájaros, puede ayudar a calmar tu mente y aliviar el estrés. Prueba a utilizar aplicaciones o música para escuchar sonidos de la naturaleza en casa. Si meditas mientras escuchas sonidos de la naturaleza, los beneficios serán aún mayores.